La pastela de pollo marroquí es un plato tradicional de la cocina marroquí que se caracteriza por su combinación única de sabores dulces y salados. La pastela es un tipo de pastel que se elabora con varias capas de masa filo rellenas de pollo desmenuzado y especias como el comino, la canela y el jengibre.
Para preparar la pastela de pollo marroquí, se comienza cocinando el pollo con cebolla, ajo y una mezcla de especias hasta que esté tierno. Luego, se desmenuza el pollo y se mezcla con huevos batidos, cilantro picado y almendras tostadas.
La masa filo se corta en capas y se coloca una capa en la parte inferior de un molde para pastel. Se agrega una capa de relleno de pollo, seguida de otra capa de masa filo. Este proceso se repite varias veces hasta que se agota el relleno y se termina con una capa de masa filo en la parte superior.
Antes de hornear la pastela de pollo marroquí, se pinta con huevo batido y se espolvorea con azúcar glass y canela para crear una corteza crujiente y dorada. Una vez horneada, se corta en porciones y se sirve caliente, adornada con un poco de perejil fresco y más almendras tostadas.
La pastela de pollo marroquí es un plato delicioso y elegante que es perfecto para ocasiones especiales. Su combinación de sabores dulces y salados la convierte en un plato único que impresionará a cualquier comensal.